Hola Sarah, mi amor.
Si bien gran parte de este blog dedicado a tí está destinado a compartirte la "forma" en que personalmente veo la vida y también a recopilar nuestras interacciones y momentos juntos, creo que es una buena oportunidad para hablarte un poquito (o mucho 😉) de mi historia. Es decir, de mi vida, y así puedas saber quién es tu papá.
La vida es una recolección de subjetividades y perspectivas, únicas para cada persona. Por eso, quién "Tú eres" con cada persona que te relacionas, termina siendo solo una versión de quién realmente eres como persona ... un fragmento ... y por si sola, esta interacción o versión de tí, no define tu totalidad.
Es por eso también que el "espectador" ... o esos actores secundarios con los cuales hasta el momento, has compartido tu vida (tus amigos, familiares, colegas, compañeros, conocidos), tienen un "idea" personal de quién Tú eres, pero no todo el mapa completo. Su perspectiva es solo eso: Su impresión.
¿Por qué te digo todo esto? --- Porque no se salva tampoco de esta "trampita" quién hace un análisis autobiográfico como el que a continuación intentaré hacer. Mi recolección de la vida que he vivido, está ligada y es afectada por el impacto que tuvieron las personas, los sucesos y circumstancias de esa vida misma en mí. ¿Paradójico cierto? :)
Entonces, aclarado esto, te cuento un poquito de la historia de Jonathan Heres💓
El Inicio | Infancia
Nací en la Ciudad de Colón, Panamá, el 24 de marzo de 1977, a golpe de las 10pm. Era un jueves si no me equivoco. Vi la luz por primera vez en el hospital público de la Ciudad, el Manuel Amador Guerrero y me dieron por nombre completo: José Jonathan Heres Kadoch.
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| El antiguo hospital Manuel Amador Guerrero (¡Quedaba frente al mar!) |
"José" en honor a mi abuelo paterno: José "Joe" Heres. El "Jonathan", por el cual, curiosamente todos me llaman desde la adolescencia, nunca supe porque fue elegido para mi segundo nombre, pero siempre me ha gustado ... me suena un tanto más "juvenil" que un llano y algo seco "José" 😊
En ese entonces (me cuentan) Colón no era la ciudad destruida, pobre y sucia que es en el presente (al año de hoy, 2021. Ojalá esto cambie en el futuro), sino que estaba en sus últimos años dorados del periodo donde era reconocida como un tipo de "tazita de oro", cuando tenía calles limpias, una cultura vibrante y debido a la Zona Libre en pleno apogeo, se mantenía como importante centro de negocios internacionales con una economía pujante.
Yo, con tan solo unos meses de nacido. Observar el faux-mohawk con que me peinaron.
Tus dos familias de parte mía, los Heres y los Kadoch ya tenían décadas de vivir en la Ciudad de Colón cuando yo nací. Ambas eran familias inmigrantes que en el pasado llegaron a Panamá en búsqueda de buena fortuna y mejor calidad de vida.
NOTA: En otros posts voy a compartirte información de la historia de estas dos familias más a fondo para que puedas descubrir y conocer un poquito más de tu ascendencia.
En este post (Click Aquí) puedes leer la primera parte de la historia de la Familia HERES.
Mis padres (tus abuelos paternos), Isaac Heres y Rosalba Kadoch ( o "Kuky" como siempre la han llamado de cariño), se unieron muy jóvenes. Tu abuela Kuky tenía 19 años y ya tenía una bebita de una relación anterior cuando se casó con mi Papá (en ese entonces de 23 años - Tu abuelo Isaac).
Esa bebita es mi hermana Elizabeth, es decir tu tía Liz, a quién tu abuelo Isaac que toda la vida ha sido un hombre digno, moral y responsable, inmediatamente adoptó como propia dándole su apellido y su amor tal cual fuese su padre biológico.
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Circa 1980 - Tu tía Liz en primer plano mirando a cámara, y Yo al fondo medidativo. Curioso como tantos niños sobrevivieron esta época de dudosos protocolos de seguridad infantil ¿no? 😚
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Después de mi nacimiento, vivimos 3 o 4 años en Colón antes de mudarnos a la Ciudad de Panamá así que las memorias que tengo de ese lugar son bastante difusas (aunque bastante vívidas) ... Estos recuerdos casi siempre están ligados a "momentos" muy particulares con personas relevantes dentro de mi familia.
Recuerdo por ejemplo que iba caminando agarrado de la mano de tu tía Liz y escuché a nuestra madre llamarnos. Tu tía, en vez de soltar mi mano, comenzó a correr aun agarrándome ... provocando que yo me cayera. ¿El resultado? Una cicatriz que tengo desde entonces en la parte de atrás del cráneo. Este fue el primero de un sinnúmero de "accidentes" que nos provocamos tu tía Liz y Yo en la mejor usanza de esos hermanos que tienen la fortuna de crecer juntos =)
También tengo un recuerdo muy especial. Era en casa de mi abuela materna (Tu bisabuela), "Isabel" donde Yo en plena sala caminaba vistiendo solo unos pañales (¿Quizá tenía alrededor de un año y medio de edad?) y recuerdo que iba avanzando caminando hacia mi abuela (QEPD) y ella me tomaba en sus brazos para luego sentarse conmigo en su mecedora y arrullarme. Este recuerdo en particular es tan vívido que lo conversé en algún momento con mi madre, describiéndole el entorno (decoración de la sala, el vestido que portaba mi abuela y demás). Curiosamente mi madre me confirmó todo lo que recuerdo como verdadero ... ¿Vaya cosa increíble la memoria no?
Y así como esta tengo decenas de recuerdos que si bien son vívidos en mi mente, parecen desligados de una clara línea temporal por lo cual me es imposible ubicarlos cronológicamente.
¿Lo importante? Todos son positivos y felices, por lo cual puedo asumir que tuve la fortuna de que mis primeros 4 años de vida fueron maravillosamente completos, estando un tanto "desligado" de las realidades del mundo dada mi corta edad, y teniendo una hermanita 3 años mayor (con quién jugar) que era prácticamente alrededor de quién giraba mi entretenimiento.
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| Si. Fui un niñito muy feliz. =) |
Dejando Colón - "Hola" Ciudad de Panamá (Alrededor de 1981)
La razón por la cual un día nos mudamos a la Ciudad de Panamá es algo que realmente nunca le pregunté a mis padres. Quizá fueron nuevas oportunidades económicas o quizá ya Colón daba señales de decaimiento, cualquiera que haya sido el motivo, siendo ya un niño de 4 años, rápidamente comencé a coleccionar nuevas memorias del recién estrenado apartamento donde nos mudamos: El PH Cibeles en la avenida Tumba Muerto (Ricardo J. Alfaro).
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| PH Fuentes de Cibeles. El primer lugar donde viví al mudarnos a Panamá. |
Recuerdo claramente que lloraba terriblemente desolado a mi madre cada vez que ella tenía que salir de casa. ¿Sentía quizá que no volvería? No lo sé ... Lo que si es cierto, es que una vez el drama pasaba, volcaba toda mi atención y energía sobre mi pobre hermana (tu tía Liz).
La atormentaba a tal punto que un día, mientras ella veía la televisión, decidí que era gracioso apágarsela. Ella se levantaba pacientemente y la encendia. Yo corría y nuevamente se la apagaba.
El "jueguito" (para mí) prosiguió por algunos minutos hasta que mi hermana, desesperada, agarró lo más cercano a su mano y me lo aventó. Sucede que era un zapato de nuestra madre ... del tipo "stiletto", con tacón de punta finísima y muy de moda en ese entonces, el cual, de manera impecablemente "tele-dirigida" fue a parar en mi rostro a menos de 2 milímetros de mi ojo derecho.
Segundo accidente junto a mi amada hermana.
Recuerdo claramente que entre gritos y montones de sangre me llevaron a una clínica. También recuerdo el color azul brillante de la tela que puso el cirujano sobre mi rostro para suturar mi nueva herida.
Al final, y como trofeo y cortesía de mi idea de "diversión", me quedó una cicatriz para toda la vida que le daba "carácter" a mi rostro.
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| Bogotá 2009 - En el ojo derecho puedes apreciar "el taconazo" - Casi dibujado cual una lágrima. =) |
Otro recuerdo que tengo sumamente claro es que en cierta ocasión "algo" se me había extraviado y estaba convencido que se encontraba debajo de una cama. Fui a la cocina y tomé un encendedor, porque "vaya, debajo de la cama esta obscuro así que tenemos que iluminar" y bueno, ya te imaginarás ... en menos de 10 segundos estaba el box spring encendido por debajo, el cuarto lleno de humo, y mi Tía Rebeca (la hermana de mi madre) gritando mientras buscaba un balde de agua.
Episodios como ese y otros tantos (como cuando me subí a la repisa de la cocina y tome mis "multivitaminas de los Picapiedras" para comérme 10 de un tiro por lo cual terminé vomitando) dejan claro que era un niño realmente inquieto e inquisitivo, lo segundo más que nada una parte fundamental de mi personalidad el resto de mi vida.
Curiosamente, ya un tanto más conciente de mis alrededores, percibí que cada día veía menos a mi padre en casa, imagino que por trabajo, y si bien, no del todo claro, puedo localizar algunos pantallazos de recuerdos que involucraban discusiones con mi madre.
Pero yo estaba muy pequeño: No entendía el concepto de matrimonio y tampoco el de divorcio ... Lo único que sé es que tan rápido como llegamos al Dorado, nos fuimos ... y fue así como un día me encontré en San Francisco viviendo con mi heramana y mi mamá en un nuevo apartamento.
Sin mi papá en casa.
Pero de eso ... de eso hablaremos un poco más en la próxima parte. ;)
Te amo,
Papá.
